Memoria histórica y natural en la Marcha a la Sima de Jinámar

Miembros de Turcón participan en la marcha que lleva más de cuarenta años realizándose.

Por invitación expresa de los organizadores, como en otros años, Turcón Ecologistas en Acción estuvo a las 11 de la mañana en la Plaza de Jinámar, con un tiempo soleado y muchos ánimos para realizar el recorrido tradicional que llevó al centenar de participantes hasta la histórica Sima de Jinámar.

Recordando la memoria natural de la Sima de Jinámar

Un camino corto y de fácil recorrido, pero que nos dejó a todos/as los participantes con malestar al ver como gran parte del camino está convertido en un vertedero incontrolado de toda clase de desperdicios.

Ya en el turno de palabra y con el tubo volcánico de la sima como anfiteatro y lugar donde las palabras y la expresión de sentimientos resuenan y se convierten en diálogo y encuentro de oradores y participantes, Turcon hace uso de su disertación para recordar que en sus 35 años de existencia, la lucha por la protección y la revalorización del Campo de Volcanes de Jinámar ha estado en su día a día.

Las propuestas de protección, la participación en procesos de información pública, las alegaciones y denuncias, se han conjugado con el trabajo de divulgación de los valores de la Sima de Jinámar  han sido una tarea señera del colectivo.

Los ecologistas recordaron los valores naturales, fauna, flora, geología y geomorfología del lugar, situándolo en lo que se ha dado en llamar volcanes recientes de Gran Canaria.

En esa tarea de aunar sensibilidades, se hizo referencia a la propuesta realizada a las instituciones y a la opinión pública en el año 2007, un compendio de valorización, con delimitación de los espacios, su puesta en uso como recurso visitable y didáctico, habilitación de una señalética informativa. Todo ello, por supuesto, procediendo a planificar los impactos existentes.

Incidimos en que seguir manteniendo el continuo de desperdicios y basuras es algo que nos debe avergonzar como pueblo. Lo que no deseamos lo situamos al lado de un retazo de nuestra historia reciente, un ataque a la educación y a la integración propia de seres sensibles.

Los ecologistas comentan de los intentos de la dictadura franquista de ocultar la masacre y el desatino de utilizar la sima con los intentos de cerrarla dinamitándola con explosivos, y después vertiendo cientos de escombros e incluso cal viva.

Ya en el final, desde Turcón se entiende que además de tener en cuenta los valores y sentimientos de una Memoria Histórica que sigue en el fondo, esperando escribir nuevas páginas de la historia de la represión franquista en Canarias.  Tenemos que seguir contextualizando y pidiendo la recuperación también de la Memoria Natural de tan singular espacio, acabando con la indisciplina urbanística que permite que las huellas de la historia estén repletas de una oscura capa de escombros y desperdicios. Un plan integral de rehabilitación es necesario y conveniente, habilitando su uso público controlado tal y como le corresponde.

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